¡Porque los adultos también pueden disfrutarlo!
Desde su lanzamiento oficial el año 2011, Minecraft se convirtió en un fenómeno mundial, tanto así que la revista TIME lo considera en el puesto número 6 de los mejores videojuegos de la historia.
En sí, la mecánica de este sandbox —creado originalmente por el sueco Markus ‘Notch’ Persson— es bastante sencillo: juntar bloques, y crear cosas. Sin embargo, la creatividad juega un factor importante a la hora de manufacturar estructuras, y en este sentido Minecraft no es muy diferente al tradicional LEGO.
Uno de los principales atractivos del juego, es que ofrece un mundo abierto el cual permite explorar y descubrir monumentos, ruinas, minas abandonadas, además de encontrar y criar todo tipo de animales (vacas, cerdos, gallinas, etc.) Pero no todo es pan comido: por las noches aparecerán mobs que intentarán atraparte, y dejar tu barra de vida en cero.
Es bastante común relacionar Minecraft con niños, ¿Y cómo no? Si es un juego con una estética atractiva y una jugabilidad bastante entretenida. El problema es que, a través de los años, la ahora propiedad de Microsoft se ha ganado una fama de ser la insignia de los llamados “niños rata”, una denominación peyorativa tomada de “Los Simpsons”, que hace referencia a infantes malcriados y molestos, generalmente encontrados en todo tipo de videojuegos online.
Esta relación provocó que la comunidad en general mirara a Minecraft de forma negativa, muchas veces injustificadamente y sin haber probado el juego, sólo porque la tendencia ya tenía categorizado el juego como exclusivo para este tipo de individuos. De hecho, ya el jugar Minecraft convierte a alguien, independientemente de su edad, en “niño rata”.
Debido a estos constantes prejuicios, adolescentes y adultos jóvenes prefieren evitar que los relacionen con este juego, muchas veces siendo el placer culpable de algunos, y odiado por otros, pues el estereotipo de infante malcriado es algo que, naturalmente, se prefiere evitar.
He ahí el error: Minecraft también puede ser un medio de entretención para los más grandes. Programación, diseño, arquitectura, pixel-art, entre otras cosas, son algunas de las actividades que jugadores más experimentados suelen realizar. Es más, grupos de jugadores alrededor del globo han realizado video-llamadas desde el juego hacia el mundo real, o construcciones impresionantes y ciudades enteras.
Desde modelos arquitectónicos a diseño de interiores, son cosas que jugadores adultos pueden disfrutar. Incluso, existe un sistema de circuitos eléctricos dentro del juego, que funciona de manera similar a los sistemas en serie, paralelo, y mixto, cuya existencia permite crear todo tipo de invenciones y experimentos en el mundo de Minecraft. De hecho, estos circuitos permitieron a un jugador crear un computador que realiza operaciones básicas, algo verdaderamente complejo para un jugador común, y mucho más para un niño.
Ya sea como medio de esparcimiento, o con fines académicos, Minecraft es un videojuego que se ha ganado una fama injusta que aleja a potenciales nuevos jugadores, quienes se privan de la experiencia que ofrece este mundo abierto de pixeles, cuya amplia variedad de posibilidades, más un poco de creatividad, permiten hacer casi cualquier cosa que se desee, siempre manteniendo la inocencia y la estética tan características del mismo.
Ser adulto no implica dejar de lado la posibilidad de ser un jugador, de disfrutar haciendo cosas que, posiblemente, no se puedan hacer en la realidad, y es por eso que no se debe caer en prejuicios sin haber antes tomado una decisión de primera mano, ya que nunca se sabe se está a punto de encontrar un nuevo pasatiempo favorito… Y en el caso de Minecraft, claramente lo es de muchos.
