Obtener la licencia de conducir por primera vez suele ser uno de los desafíos más importantes de una persona, e incluso a veces este proceso se torna desgastante.

Para lograr sacar este documento en Chile, es no necesario realizar una prueba teórica, seguida de un examen práctico que consiste en ponerse al volante y cumplir con las órdenes que entrega un funcionario municipal que estará a cargo de tomar la prueba.

Ese es el momento clave del proceso: si el postulante comete un simple error o alguna omisión arriesga reprobar el examen y empezar todo de nuevo.

Por ello, desde la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (CONASET) explican que el examen está compuesto de dos partes: una está dedicada a la conducción libre y otra, a la conducción guiada.

En la primera etapa, el aspirante solo deberá trasladarse hasta un destino acordado previamente con su evaluador, sin recibir órdenes ni instrucciones.

Luego, en la segunda parte, el examinador dará ciertos lineamientos al postulante para que regrese al punto de origen. Esto es lo que se conoce como conducción guiada, debido a que podrá solicitarle que se estacione u otro tipo de maniobra.

¿Cómo se aprueba o reprueba el examen? Según la normativa de la CONASET, el postulante a la licencia de conducir será evaluado en base a sus errores, es decir, lo que ejecute correctamente no le sumará puntos para aprobar, sino que serán sus faltas las que vayan restando puntaje.

“Una de las principales razones de un postulante para no aprobar el examen práctico son los nervios. Se estima que cerca del 47 % de los aspirantes a obtener la licencia reprueban esta etapa, sin embargo, se trata de personas que han superado la parte teórica. Por eso llama la atención que no son faltas de conocimientos en torno a la normativa de tránsito, sino sencillamente errores cometidos producto de la presión del momento”, afirmó Juan José Santa Cruz, gerente general de EstoySeguro.

¿Cómo se clasifican los errores en el examen práctico?

Según el manual de Conaset, existen tres categorías: leves, graves y reprobatorios. Estos últimos son 8 y el sólo hecho de cometer alguno significará que el examen se da por finalizado, incluso antes de cumplir el tiempo o la extensión mínima.

Los errores reprobatorios son:

• No usar cinturones de seguridad, tanto en asientos delanteros como traseros.
• Incorporarse a una vía, ya sea de viraje, cambio de viraje o cambio de pista, obligando a otros conductores con prioridad a modificar su trayectoria.
• Sobrepasar la berma.
• No detenerse ante una luz roja o un signo Pare.
• Pasar a llevar a personas, animales, vehículos o cualquier otro elemento.
• Perder el control del automóvil.
• Sobrepasar la velocidad máxima permitida.
• Desobedecer las órdenes o señales de tránsito entregadas por un funcionario de Carabineros.

Aunque los anteriores son los errores considerados gravísimos, dado que son reprobatorios en sí mismos, también existen otras faltas que, si se acumulan, pueden significar un fracaso en la prueba.

De este modo, el postulante reprobará si comete: 2 errores graves o más, 5 errores leves y 1 grave o más, y 10 errores leves o más.

¿Cuáles son los errores graves, según CONASET? Te los detallamos a continuación:

• Realizar incorporación a la circulación, viraje o cambio de pista obstaculizando a los demás usuarios que cuentan con prioridad, sin generar riesgo de accidente.
• Cambiar sorpresivamente de pista obstruyendo la circulación.
• No señalizar al cambiarse de pista o señalizar erróneamente.
• Sobrepasar o adelantar en paso de peatones y cruces no regulados.
• Adelantar generando riesgo para los vehículos que transitan en sentido contrario.
• Ingresar a intersección sin tener el espacio suficiente, obstaculizando el tránsito de otros vehículos y peatones.
• Abrir la puerta y descender del vehículo sin observar.
• No respetar señal de prioridad “Ceda el Paso” (vertical o demarcación).
• No respetar señales de prohibición, restricción y obligación.
• Sobrepasar sostenidamente el eje central de la calzada, generando riesgo para los otros usuarios de la vía.
• Circular sin encender luces correspondientes cuando su uso sea obligatorio o necesario.
• Confundir pedales: embrague, freno, acelerador.
• Soltar momentáneamente las dos manos del volante, siempre que no exista pérdida de dominio.
• Conducir el vehículo contra el sentido del tránsito.
• Circular sin mantener una distancia razonable y prudente respecto de otros usuarios de las vías.
• Manipular elementos electrónicos o la radio del vehículo durante el examen.
• No respetar el derecho preferente de paso de peatones, ciclistas y otros vehículos.