La vacancia general del mercado de oficinas en Santiago se mantuvo en un nivel estable, oscilando entre el 8,8 % y el 8,9 % tras la incorporación de dos nuevos edificios Clase A en el sector de Las Condes, que sumaron un total de 29.691 m² al inventario de la capital. Según el último informe trimestral de JLL Chile, correspondiente al tercer trimestre de 2025, esta variación leve en el índice de vacancia refleja una salud sostenida en el mercado, a pesar del constante crecimiento en la oferta de nuevos espacios. Este escenario demuestra la estabilidad y la recuperación gradual del sector inmobiliario de oficinas en la ciudad.
Durante el tercer trimestre, la absorción neta de oficinas en Santiago alcanzó un total de 23.510 m², lo que permite sumar a un total acumulado de aproximadamente 67.000 m² en lo que va del año. Esta cifra reafirma la solidez de la demanda en el mercado, enmarcada en un contexto de recuperación. A pesar de la llegada de nuevos edificios, que representan un crecimiento en la oferta, la absorción efectiva se ha mantenido robusta, lo que insinúa un interés continuo por parte de las empresas en establecerse en espacios de calidad.
El informe también destaca que el submercado de Las Condes sigue siendo el principal motor del sector, concentrando el 75 % de la absorción trimestral y la totalidad de la nueva oferta disponible en este periodo. Este fenómeno posiciona a Las Condes como el polo preferido para las oficinas en Santiago, atrayendo a organizaciones que buscan locales con estándares más altos. La demanda del mercado evidenció una distribución del 58 % para oficinas Clase A y un 42 % para oficinas Clase B, indicando un notable deseo por espacios que cuenten con una excelente ubicación y accesibilidad a servicios.
En términos de precios, el informe revela que las rentas pedidas de oficinas Clase A continuaron su tendencia ascendente, alcanzando un promedio de 0,54 UF/m². Este aumento se debe en gran parte a la llegada de nuevos proyectos de alta calidad al mercado, consolidando así un contexto favorable para los propietarios. En contraste, las rentas de las oficinas Clase B se mantuvieron estables en 0,41 UF/m², lo que sugiere que estos espacios han logrado adaptarse frente a la competencia del nuevo stock disponible.
Finalmente, las proyecciones para el resto del año indican que la actividad en la demanda se mantendrá viva, principalmente con un enfoque en edificios Clase A. Según el director de Oficinas de JLL, Jorge Araos, es previsible un aumento en la absorción durante el cuarto trimestre, periodo reconocido por el cierre de contratos y presupuestos corporativos. Además, el ajuste progresivo en los precios sugiere un cambio potencial hacia un mercado más pro-arrendador después de varios años de ser pro-arrendatario, lo que podría cambiar el rumbo del comportamiento del mercado en el corto plazo.





